Fuente: Netmedia
Autor: Efrain Ocampo
Fecha: 09 de febrero, 2011

En un nuevo capítulo de su telenovela de Wikileaks “Dos países, un camino”, México pactó con Estados Unidos su ingreso al Acuerdo Comercial Antipiratería (ACTA) con tal de recibir apoyo y asesoría en temas como tecnología, patentes y legal.

Según el cable revelado por Wikileaks dado a conocer como 07MEXICO6229 , el problema del contrabando y la piratería es grave, por lo que a cambio de la participación de México obtendrían ayuda estadounidense. Hay una cita que vale oro y que recupero:

“Autoridades de protección de propiedad intelectual del gobierno mexicano han sido entusiastas en resaltar su creciente rol activo en la arena internacional haciendo hincapié en su disposición para unirse a las negociaciones de ACTA, así como para abatir los esfuerzos brasileños por socavar los derechos de propiedad intelectual en organizaciones internacionales del sector salud”, según el cable.

El acuerdo entre México y EU arroja luz sobre el papel del país en el ACTA y de cómo países en desarrollo respaldaron la iniciativa impulsada principalmente por empresas de contenidos estadounidenses para legitimar el ACTA entre naciones afines y que no pareciera una imposición… ya saben, imperialista.

Por lo pronto la Federación Internacional de la Industria Fonográfica (IFPI) ha buscado establecer acuerdos con proveedores de servicios de internet (ISP) de todo el mundo. En la IFPI están convencidos de que la colaboración de los ISP en el combate de la piratería digital es clave y que tienen una responsabilidad que deben asumir. Qué tal. Pero no es todo. Pues ha comunicado que:

“La cooperación de los ISP es un componente clave para atacar el problema y donde los acuerdos voluntarios no sean posibles, entonces las regulaciones gubernamentales deberán garantizar que los derechos de propiedad intelectual son respetados en línea”, así que la industria que está detrás de estos intereses no se dará por vencida fácilmente.

El Senado de la República no se ha opuesto a la firma del tratado internacional, sólo a que el Ejecutivo lo negocie por su lado. Por el contrario, ya se organizó el primer foro de discusión del tema al interior del Senado y continuarán sondeando la opinión de académicos, industria, funcionarios y expertos, además de público interesado en el tema.

ACTA busca que se castigue con las leyes locales la falsificación de marcas y la piratería en internet de contenidos protegidos. Una de las propuestas más polémicas ha sido castigar a los usuarios a través de la limitación del servicio que ofrecen los proveedores de servicios de internet (ISP) o proveedores de servicios en línea, quienes habrían de usar sus recursos para monitorear la descarga de piratería desde internet.

Asociaciones como la Asociación Mexicana de Internet (AMIPCI), la Asociación Mexiacana de la Industria de Tecnologías de la Información (AMITI) y la Cámara Nacional de la Industria de Electrónica, Telecomunicaciones y Tecnologías de la Información (Canieti) se han pronunciado en contra de ACTA y lo han tildado de anticonstitucional.

De ser firmado ACTA por la autoridades mexicanas el tratado estaría por encima de las leyes locales y federales por ser un acuerdo internacional, así que el asunto es delicado por donde se le mire. Ya veremos en qué para esta historia, que aún no termina.