Cada vez es más común que encontremos en Internet noticias falsas o fake news y no se limitan a un solo ámbito, como cuando ocurre algún fenómeno de la naturaleza, si no que se dan en una gran variedad de temas.

Pero ¿qué origen tienen las fake news?

Es un hecho que desde que existe el periodismo o la actividad de difundir noticias, pero el término como tal tomo auge durante el final de la campaña de Donald Trump en el año 2016.

Algunas personas en un pueblito de Macedonia buscaban alguna forma de hacer unos cuantos dólares por medio de Facebook y empezaron a generar noticias falsas. Una de las más conocidas fue una nota que tenía como titular “El Papa Francisco sorprende al mundo, apoya a Donald Trump como presidente”, lo cual obviamente era mentira. Pero un titular de este tipo puede atraer a mucha gente, punto que precisamente intentaban los que empezaron a generar este tipo de noticias desde Estados Unidos mientras otros generaban algunos dólares desde Macedonia.

Hoy en día, el término “Fake news” ya ha perdido mucha de su relevancia y se usa para etiquetar a muchas cosas como teorías de conspiración, farsas, desinformación o intentos de propaganda política. Incluso se usa ese termino ya con fines de desacreditar a la gente o medios que en algún momento se equivocan.

¿Por qué subió tanto la fama de las fake news? Los jóvenes de Macedonia entendieron algo que puede pasar en las redes sociales, que es la viralización de los contenidos. Durante las elecciones de 2016, casi cualquier cosa que se publicara con respecto a ellas se convertía en algo viral. Y si se le daba un título que atrapara a la gente, era casi de seguro que todo mundo llegaría a leerlo.

El principal problema que se genera de las fake news es que en muchas ocasiones no se verifica la información o de donde proviene, y se toma esa “noticia” como algo real y cierto. Incluso medios periodísticos con gran presencia en Internet y redes sociales han llegado a caer en la trampa de las fake news y tomarlas como algo real, llegando a publicarlo.

En México, después del sismo que sacudió a la Ciudad de México en septiembre de 2017, empezaron a circular muchas fake news desde personas inexistentes que seguían enterrados, perros rescatistas que murieron, avisos de sismos más fuertes o que había gente de gobierno visitando los inmuebles dañados. Todas ellas eran noticias falsas que aparecían de repente en las redes sociales y por la situación no se hacía ninguna verificación de estas.

A raíz de todo este tipo de situaciones han surgido iniciativas como Verificado19S o Verificado 2018 en México, que consisten en que hacen una revisión mayor de la información que se difunde en medios o redes sociales. También las redes sociales están tomando acciones con respecto a este tipo de acciones, como Facebook que está formando alianzas con organizaciones externas que verifican las noticias.

Desafortunadamente (o afortunadamente) las redes sociales, su inmediatez y su facilidad de acceso, han permitido que todos tengamos una voz en Internet. Antes esto estaba reservado para gobiernos, empresas o personas con dinero que tenían la posibilidad de difundir noticias falsas con la finalidad de influir en la opinión pública, pero ahora casi cualquiera con acceso a Internet se puede poner al tú por tú con ellos.

Lo ideal es que cada uno verifique las fuentes o el origen de lo que leemos antes de compartirlo y si no tenemos la posibilidad de hacerlo, hay que solo compartir información que provenga de medios que si estén verificados.

Y no compartir solo por compartir.